Presupuestos municipales

Peñaranda ya tiene presupuestos municipales para este año y asciende a casi siete millones y medio de euros, una cifra nada desdeñable que tiene el objetivo de intentar hacer mejor la vida a los peñarandinos. Hasta aquí nada reseñable, la sorpresa llega cuando estas cuentas municipales son aprobadas por dos partidos políticos que están en las antípodas ideológicas: el Partido Socialista, que gobierna Peñaranda con Carmen Ávila como alcaldesa, y Vox, con su único concejal, Fernando Pérez de Gregorio. Por principios, el PSOE nunca acepta la mano tendida de Vox, por considerar a este partido de extrema derecha, pero, paradojas de la vida, no rechazan su apoyo si sirve para alcanzar los objetivos, como en este caso es la aprobación de los presupuestos municipales. Peñaranda En Común, formación de extrema izquierda, no iba a apoyar las cuentas de Carmen Ávila, después de los incumplimientos de sus peticiones durante 2024, cuyos presupuestos fueron apoyados por el PSOE y Peñaranda En Común. De las razones del voto favorable de Vox, poco o nada se sabe, después de que su único concejal no lo explicara en su turno de palabra del Pleno, algo tendría que decir. Hasta aquí la parte política del asunto, ahora hay que indagar en el fondo de los presupuestos que invierten en servicios para los peñarandinos, que está muy bien, pero se dejan un tanto de lado, la atracción de empresas que fomenten el empleo en la localidad. Peñaranda está sumida en una crisis económica que hace que languidezca año tras año y de nada servirá que tengamos muchos servicios si los peñarandinos no tienen un puesto de trabajo con el que ganarse la vida. Hace falta que el Ayuntamiento atraiga y facilite el asentamiento de nuevas empresas a la ciudad si queremos que Peñaranda tenga futuro a medio y largo plazo. Y como muestra sólo hay que preguntar a los comerciantes y ver cómo los carteles de se vende o se alquila son cada vez más comunes en el centro del casco urbano.

Francisco Javier Martínez