Buenos mediodías, un martes más, desde los micrófonos de COPE Peñaranda. Un martes donde quiero alzar la voz a algo, tan, pero tan importante, que en infinidad de ocasiones y por el fluir de los días olvidamos y es la salud. La salud en el trabajo.
No me gusta empezar en negativo, ni tampoco en pasado, por lo tanto diré que el 24 de marzo de 2025, ósea, la semana anterior a esta que hoy comenzamos y que abre un nuevo mes, escuchaba, en estos micrófonos, a una buena amiga y compañera de profesión que decía: “lo primero que nos piden al momento de buscar empleo es experiencia”. Qué razón, Elena, y también se piden nuevas ideas, feedback para favorecer la resolución de imprevistos y conflictos, actitud positiva y resultados. Fácil a simple vista ¿verdad?…Sobretodo cuando se cuenta con un ambiente en el que nadie tenga la sensación de ser juzgado, en el que la persona -sí, persona- pueda contar con tiempo para la vida personal, en el que el respeto y la claridad sea por encima de todo, en el que el acceso a responsables y coordinadores sea clave en el día a día y en el que se alimente la idea de equipo y se favorezca el conocimiento de las personas que conforman la unidad. También, donde si se dice que lo profesional va por un lado y lo personal por otro…sea, de una forma u otra, para todo.
En definitiva, cuando hablamos de un ambiente de trabajo saludable, hablamos, como define la Organización Mundial de la Salud, de aquel en el que se colabora en un proceso de mejora continua para proteger y promover la salud, la seguridad y el bienestar de todos los trabajadores y la sostenibilidad del espacio de trabajo. Gracias a Dios, siempre, una gran mayoría, se salva…y hay otra…que se olvida de la salud, y por ende, de lo que significa trabajar.
No me gusta acabar en negativo, ni tampoco en pasado, por lo que diré que somos personas, somos humanos, por encima de empleados.
Feliz martes, Peñaranda.
Vera Cotelo