Este verano se han celebrado los Juegos Olímpicos de París. Han sido, sin duda, unas Olimpiadas que los peñarandinos hemos seguido con especial interés e ilusión gracias a la participación de nuestra atleta más internacional, Lorena Martín. Y, tras los Juegos Olímpicos, le llegaron el turno a los Juegos Paralímpicos, que se clausuraron el pasado 8 de septiembre.
Sin embargo, la cobertura de ambos eventos ha sido un tanto diferente. De entrada, la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos –que contó con brillantes actuaciones internacionales y con una puesta en escena para el recuerdo a lo largo del río Sena– fue televisada por la 1 de TVE, mientras que el acto de apertura de los Juegos Paralímpicos –que también brilló por su calidad artística y por los medios empleados– se televisó por la 2 de TVE, una cadena con menor audiencia. Lo mismo ha sucedido con la mayor parte de pruebas deportivas y con el acto de clausura, que, en la modalidad paralímpica, tampoco han sido televisados por la primera cadena de la televisión pública.
¿Cómo es posible que ambas citas no hayan tenido la misma cobertura en España, tratándose de eventos protagonizados, igualmente, por deportistas de élite y teniendo en cuenta que el número de medallas en los Juegos Paralímpicos fue más del doble que en los Juegos Olímpicos? A las 40 medallas logradas por los deportistas paralímpicos españoles, debemos, además, sumar que sus vidas y sus carreras son verdaderos ejemplos de superación. Ojalá el deporte tenga la repercusión que se merece por cuestiones puramente deportivas, independientemente de quién lo practique, y que la sociedad se encamine, de veras, hacia la plena inclusión.