Hola, Miguel.
Te hago una pregunta hoy: ¿cuánto sabes de lucha grecorromana? Probablemente, lo mismo que todos los oyentes que están con nosotros ahora: nada. De hecho, me atrevería a decir que ni siquiera has visto un combate en tu vida.
Pues bien, ayer comenzó la lucha en los JJOO. Para nosotros, españoles, es algo baladí, pues no tenemos luchadores clasificados. Ahora bien, para un país tan remoto y desconocido como Kirguistán ayer fue un día importantísimo. Este país asiático de menos de siete millones de habitantes es una potencia en un deporte que tiene más de dos mil años de antigüedad.
Quizá por la tele, desde España, sea difícil poder seguir la competición de lucha. Aquí, sin embargo, es precioso acercarse al estadio que han montado en los Campos de Marte, al lado de la Torre Eiffel, para compartir un rato con gente de culturas, tradiciones y deportes tan distintos.
No olvidemos que los Juegos Olímpicos deben ser una excusa para la unión de pueblos.
Por cierto, para ir acercándonos un poco al pueblo kirguí: la capital es Biskek y su moneda es el Som.