Tristeza, vacío, desesperanza, ansiedad o inquietud contante son algunos de los síntomas de la depresión, una tenebrosa situación que cada vez afecta a más personas. Tal vez no sepas de que estoy hablando; si es así, es toda una suerte. Sin embargo, hoy en día la depresión afecta a más de 300 millones de personas en el mundo. Personas que simplemente sobreviven, pues la situación que padecen en ocasiones ni siquiera les permite hacer algo tan habitual como lo es levantarse de la cama al despertar por la mañana. La depresión es cada vez más común en nuestra sociedad, y resulta paradójico que, en una época en la que cada vez contamos con más medios que supuestamente buscan facilitar nuestras vidas, las personas cada vez se encuentran en peores condiciones psicológicas. En un mundo en el que todo transcurre con tanta rapidez, no todas las personas están capacitadas para adaptarse a los constantes cambios que ocurren con tal celeridad. Por eso, es importante que todos nos esforcemos por fomentar valores que sean benévolos para la salud mental y que se normalice el hecho de acudir a profesionales que ayuden tanto a prevenir como a sanar estas situaciones que atormentan y hacen tan difícil la vida de tantas personas.
Hoy, 13 de enero, Día Mundial en la Lucha contra la Depresión, quiero enviar todo mi apoyo a todas aquellas personas que la padecen, porque, aunque a veces parezca difícil, sigue habiendo motivos por los que sonreír.
Elena Rodríguez Martín