El pasado Domingo de Ramos, cuando peñarandinos y visitantes nos reunimos para acompañar la imagen de Jesús en la Borriquilla, comenzó la Semana Santa. Sin embargo, esta vivencia no empieza de forma repentina: desde hace semanas, la Cuaresma nos ha venido preparando interiormente para afrontar lo que esta semana significa.
Estos días, revivimos los momentos más intensos de la vida de Cristo: su entrada triunfal en Jerusalén, su Pasión y Muerte y el glorioso anuncio de su Resurrección que celebramos durante la Vigilia Pascual y el Domingo de Resurrección. Todo ello se conmemora a través de celebraciones litúrgicas y procesiones que llenan nuestras calles de fe y tradición. El incienso vuelve a impregnar el aire de Peñaranda y nuestras sagradas imágenes hacen que nuestra ciudad vista como un auténtico museo en la calle, aunando arte y devoción.
A través de las ondas de Cope Peñaranda, me gustaría desearles una Semana Santa llena de emoción y profundidad espiritual. Que estos días nos encuentren con el corazón abierto, dispuestos a caminar junto a Jesús en su entrega de amor. Porque Semana Santa no es solo una tradición heredada, es el latido vivo de una fe que nos une, que nos conmueve y que nos renueva cada año.
Virginia Sánchez Rodríguez