Adoradores de Salamanca, Peñaranda y otros pueblos de la Diócesis se han reunido este sábado en Peñaranda con motivo de la Vigilia de Espigas. Los actos comenzaron a las nueve y media de la noche con la recepción de banderas en el convento de las Madres Carmelitas. Seguidamente tuvo lugar la procesión hasta la parroquia donde rezaron el rosario, vísperas y acudieron a la celebración eucarística.
Los asistentes se desplazaron en procesión con la custodia hasta un altar colocado en la puerta del instituto Germán Sánchez Ruipérez donde realizaron una oración y procedieron a la bendición de campos. Para terminar regresaron a la parroquia. Allí rezaron completas y después degustaron un pequeño ágape.
Uno de los miembros de la Adoración Nocturna de Salamanca, Francisco Vicente, ha explicado que la Vigilia de las Espigas «consiste en ir al rezar a Santísimo, adorarle y salir en procesión a bendecir los campos. Hace años era lo normal ahora cuando realizamos la bendeción de campos también lo hacemos en referencia a las industrias o a los servicios que recibimos». Este acto se celebra cada año en un municipio diferente de la Diócesis.