Este fin de semana ha tenido lugar la Gala de los premios Goya. Un año más, el cine español se ha vestido de gala para premiar las mejores obras cinematográficas. Como es habitual, los periódicos y revistas se han llenado al instante de los momentos más destacados que se vivieron la noche del sábado en el Palacio de Congresos de Granada.
En una noche como esta, en la que parece caber todo, no han faltado los guiños y discursos reivindicativos. En esta ocasión, se han sacado a relucir temas como la guerra, el derecho a una vivienda digna, la educación, las víctimas de la DANA e, incluso, ha habido menciones al presidente de Estados Unidos. Pero, sorprendentemente, tan solo en una ocasión, se han acordado de uno de los temas que afectan a muchos de los pueblos de nuestro país: la despoblación.
Los galardonados al mejor cortometraje documental “Semillas de Kivu”, se acordaron de mencionar a esas zonas que están tan olvidadas para muchos españoles. Concretamente, Pilar Sancho, la productora del cortometraje premiado, pronuncio la frase: “llenar los pueblos de gente que están llenos de amor”.
Tal vez sean muchos los problemas que afectan a la humanidad hoy en díay todos poseen una alta gravedad e importancia, pero resulta triste que, en una gala española, se mencionen problemas externos a nuestro país y casi nadie se acuerde de esa España Vaciada.
Una España Vaciada carente de personas, pero que, como dijo Pilar Sancho está llena de amor. Y es que eso es lo que falta en esta humanidad: un poquito más de amor, el cual parece haberse perdido, pero que es muy necesario para llenar los corazones de todos aquellos que perjudican el mundo.
Elena Rodríguez Martín.